OBSERVACIÓN DEL CÁNCER DE PRÓSTATA.

Implica asumir que el tumor nunca será capaz de causar la muerte del paciente y es altamente improbable que llegue a provocar síntomas relacionados con su diseminación (metástasis) o crecimiento local. Es la
conducta más apropiada en pacientes con esperanza de vida inferior a 10 años.

El paciente se sigue con periodicidad semestral o anual realizando un PSA, tacto rectal y registrando la sintomatología asociada.

SEGUIMIENTO ACTIVO.

Consiste en ofrecer a los pacientes diagnosticados de un cáncer de próstata de pronóstico favorable un abordaje inicialmente conservador con un seguimientocercano, procediendo a tratar solo a aquellos que, a lo largo del mismo, se reclasifican a un grupo de mayor riesgo, o bien a aquellos que lo solicitan.

El éxito en nuestros pacientes tratados de cáncer de próstata pasa por un interés especial en su patología y un cuidado estudio de todos los aspectos anteriores, para ofrecer el diagnóstico y tratamiento idóneo para sus características.

Criterios de selección

Los candidatos serían pacientes con tumores de bajo riesgo e intermedio. Aquellos de muy bajo riesgo serían los que cumplen los criterios definidos retrospectivamente por Epstein: Gleason 6, densidad de PSA < 0,15, un
máximo de 2 cilindros afectos y ninguno con afectación 50% o > 3 mm.

Los de riesgo bajo serían aquellos Gleason 6 con PSA < 10 y que no cumplan los criterios anteriores.

Algunos asumen que los Gleason 7, sobre todo en los que el patrón 4 es minoritario (< 10%), podrían ser candidatos apropiados. Aunque la edad no es considerada como un factor a tener en cuenta, no está demostrado que un tumor de esas características diagnosticado en pacientes de entre los 50-65 años sea realmente indolente si sobreviven lo que se espera para su edad. Por tanto, la afirmación de que los tumores Gleason 6 son clínicamente indolentes debería ser considerada en relación a la esperanza de vida de los pacientes. Una cohorte de pacientes suecos con CaP no tratado, seguidos durante más de 30 años, ha puesto de manifiesto que aquellos de alto grado fallecerán antes de 10 años y que los de bajo grado experimentan una progresión a metástasis y una mortalidad a largo plazo del 13%.